Las inclemencias del tiempo

Hola! Qué tal este puente que ya termina?
Yo lo empecé llevando mis manoletinas de leopardo, y es que a las 7 de la mañana del viernes nada(vale, el día anterior salió en "el tiempo" pero no veo la tele) hacía presagiar el aguacero que me iba a encontrar por la tarde.
Después de la semana enferma pensé que me merecía una tarde lúdica. Así que después del cole, ir al médico a por el alta y comer me fui en busca de mis chicas a sus respectivos lugares de trabajo. Y mientras charlábamos en una cafetería del centro de Madrid se nos ocurrió ir a dar una vuelta, así que nos pilló el diluvio sin paraguas ni calzado adecuado. Y con los pies calados la única solución que se nos ocurrió fue darnos el capricho de unas "katiuskas".
Recorrimos un montón de zapaterías y no había (qué poca visión de negocio). Así que a las 20:29, a punto de cerrar nos encontramos con estas:

Había más modelos pero estas fueron las que más nos gustaron(digo "nos" porque otra amiga mía que estaba haciendo "chof, chof" como yo también se las compró).
Así que salimos de la tienda felices con nuestras botas nuevas, un capricho que por fin nos dimos, era el día. Pero, como suele pasar, fue poner un pie en la calle y paró de llover.


Cuando me vio mi madre al día siguiente(también llovía y me las volví a poner), me puso cara rara, pero mi sobrina me devolvió la ilusión diciéndome que ella también quería unas iguales.
Hasta la próxima!